La situación económica de muchas personas se ve afectada por numerosos imprevistos que surgen en su vida diaria. Además, se ven disminuidos sus ingresos debido a factores externos, lo que ha ocasionado atrasos y demoras en el cumplimiento de sus responsabilidades financieras con los bancos.
Por eso, en esta ocasión queremos darte algunos consejos que ayudarán a negociar tus deudas y así evitar la angustia y la desazón por permanecer en mora. Además, recuerda que permanecer en mora con tus deudas, genera reportes negativos ante centrales de riesgo lo que te impedirá acceder a futuros productos de crédito.
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Negociar o diferir tus deudas es un beneficio que brinda tu banco para ayudarte a manejar tus finanzas de manera más efectiva. Al optar por esta opción, tienes la posibilidad de reducir el monto mínimo mensual de pago y extender el plazo de pago total, adaptándolo a tus necesidades y capacidad financiera.
Esto te proporciona la oportunidad de reorganizar tus pagos y mejorar tu flujo de caja mensual, permitiéndote ponerte al día con tus obligaciones de manera más cómoda y conveniente. No dudes en aprovechar este beneficio y tomar el control de tus finanzas de manera inteligente.
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1. Presta atención a toda la información:
Los asesores de cobranza, expertos en el área, deben brindarte información detallada y completa acerca de las condiciones actuales de tu deuda, así como las del nuevo plan de pagos que te ofrecen. Es fundamental que aclares cualquier duda que surja, ya que esto evitará posibles malentendidos en el proceso de negociación y permitirá que la misma se lleve a cabo de manera transparente y clara para ambas partes involucradas. No dudes en hacer todas las preguntas necesarias para asegurarte de entender todos los aspectos y términos de la negociación. La comunicación abierta y franca con los asesores de cobranza te brindará tranquilidad y confianza en el acuerdo al que lleguen juntos.
2. Informa en detalle tu situación:
Si te encuentras en situación de desempleo, has experimentado una disminución en tus ingresos o te encuentras con otras obligaciones financieras adicionales, es de vital importancia que lo informes cuanto antes. Esta acción resultará fundamental para definir los términos de la negociación y permitirá una mayor facilidad a la hora de llegar a un acuerdo que beneficie tanto a ti como a la contraparte involucrada. No subestimes el valor de la comunicación transparente y oportuna en situaciones financieras complicadas.
3. Analiza a fondo las opciones:
Durante el proceso de negociación, llegarás a un punto en el que la entidad financiera te ofrecerá diversas alternativas para reajustar los pagos de tu deuda. Estas opciones variarán principalmente en cuanto al monto a pagar y al plazo establecido. Te recomendaría revisar cada una de ellas detenidamente y evaluar si se ajustan a tus necesidades y posibilidades. Recuerda que es fundamental evitar seguir en mora, ya que esta no es una de las posibilidades viables. Tener claridad sobre tus opciones te permitirá tomar decisiones más informadas y salir de la situación actual.
4. Se amable y cordial
Sabemos que recibir mensajes y llamadas de cobranza puede ser desagradable e incluso agotar tu paciencia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el asesor de cobranza está cumpliendo con su trabajo y, al igual que tú, solo busca encontrar una solución a la situación.
A través de una conversación amable y respetuosa, podrás establecer una comunicación más efectiva y será mucho más fácil llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes involucradas.
5. Firma los acuerdos
Después de validar cada posible solución, es importante que aceptes el plan de pagos que mejor se adapte a tu situación financiera actual. Evita hacer promesas que no puedas cumplir, ya que esto podría llevarte a caer nuevamente en una situación de mora, lo cual podría perjudicar tus posibilidades de negociación en el futuro. Es fundamental ser realista y tomar decisiones responsables para mantener una buena relación con los acreedores y lograr una eventual solución satisfactoria.
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6. Comprométete y cumple
Lamentablemente, te encuentras en una situación donde adquiriste una deuda y, por diversos motivos, te has retrasado y ahora estás en mora. No obstante, es crucial que asumas tu responsabilidad y cumplas con los acuerdos pactados. Siguiendo con el compromiso y la puntualidad, podrás superar esta situación de manera exitosa.
Llegar a una situación de mora con tus obligaciones financieras indica que posiblemente fallaste en el manejo de tus finanzas. Así que te recomendamos reestructurar la forma en la que manejas tu dinero, realiza un presupuesto mensual y evita volver a pasar por esta situación.
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